No es ninguna tontería que en cualquier actividad profesional se busquen medidas para reducir el gasto corriente. En el caso de la automoción está claro que el combustible es la partida que más cuesta, y especialmente en esta crisis en la que el precio del diésel está por las nubes.
Una de las novedades que más nos ha sorprendido es la centralita digital Boxmind. Un pequeño aparato que se conecta entre el calculador original del motor y el sistema de inyección del vehículo y consigue un ahorro de combustible entre el 10 y el 20 por ciento. Pero además aumenta hasta una cuarta parte el par del motor.
Este pequeño aparato modifica el volumen, la presión, la densidad y la mezcla de oxígeno para aumentar la rentabilidad del proceso de inyección del combustible. A diferencia de otros productos similares que se encuentran en el mercado, este no aumenta la presión de inyección o parámetros del turbo, por lo que no se le exige más al motor de lo que se le somete inicialmente.
Este aparato es de muy fácil instalación y puede colocarse en todo tipo de vehículos de diésel o gasóleo (tractores, turismos, camiones, furgonetas). Es de tecnología alemana, país en el que se fabrica.
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